Entrada destacada

ADORACIÓN EUCARÍSTICA ONLINE 24 HORAS

Aquí tienes al Señor expuesto las 24 horas del día en vivo. Si estás enfermo y no puedes desplazarte a una parroquia en la que se exponga el...

lunes, 18 de julio de 2016

Evaluando las 4 puertas santas de Roma en el año jubilar de la Misericordia

La estética es importante, pero no es el único criterio para esta valoración


Roma, no obstante, tiene superabundancia de gracias (tenemos en un mismo lugar al papa Francisco, la capilla Sixtina y delicioso gelato), y también rebosamos Puertas Santas: ¡cuatro puertas santas en las basílicas papales, más cuatro puertas de la misericordia y una puerta de la caridad!

Primero y ante todo, las Puertas Santas son un símbolo de la apertura de Dios y de su deseo de perdonarnos, de su disposición a esperarnos con las puertas abiertas y con los brazos abiertos como el padre que espera al hijo pródigo.

En la Bula Papal Misericordus Vultus, que proclamó este Jubileo, el papa Francisco escribía: “la Puerta Santa (…) en esta ocasión será una Puerta de la Misericordia, a través de la cual cualquiera que entre podrá experimentar el amor de Dios que consuela, que perdona y ofrece esperanza” (MV3).

Las cuatro puertas de las basílicas papales están tapiadas cuando no están en uso y el antiguo rito de abrir las puertas solía requerir martillear las puertas hasta derribarlas. (Desde que unos escombros casi alcanzaran al papa Pablo VI en 1974, la práctica fue abandonada).

A la que escribe, las puertas me recuerdan a una escena de la serie de televisión Días felices en la que Fonzie tenía que reconocer que estaba equivocado pero no conseguía pronunciar las palabras para admitirlo. A mi parecer una Puerta Santa tapiada simboliza una barrera entre nuestro orgullo y nuestra contrición.

Pero ya es suficiente, ¡vayamos con nuestra clasificación de Puertas Santas! Para abreviar, revisaremos las cuatro papales más soberbias, ¡aunque el año todavía da para mucho más!

Ni que decir tiene que la estética tiene su importancia (hablamos de Italia nada menos), pero los criterios para la evaluación de nuestras Puertas Santas son la información, el espíritu de bienvenida y —citando al Concilio de Trento— el “estímulo para la piedad”.


4) San Juan de Letrán – Tal vez la Puerta Santa más antigua, además de la catedral de Roma, aunque si no fuera por los incansables voluntarios del jubileo que permanecen a su alrededor, sería difícil de distinguir. Hay unos pequeños recortes de flores de plástico, que tal vez decorarían mejor un puesto callejero de gelato, y un par de plantas en macetas también de adorno. Los peregrinos se quedan un poco perplejos, sin saber qué hacer una vez llegados al lugar, puesto que no hay señales que expliquen las condiciones para la indulgencia, ni tampoco textos con oraciones que ayuden a solemnizar esta ocasión. Además del hecho de que las puertas de bronce de Floriano Bondini jamás podrían confundirse con las “puertas del paraíso” de Ghiberti en Florencia, lo primero que afrontará el peregrino a su llegada es una barrera de madera… que no es precisamente el símbolo de misericordia más apropiado.

Por otro lado, hay muchos confesores disponibles, montones de lugares donde rezar y, tan pronto cruzas la barrera, encuentras el fresco de Giotto del primer año jubilar de la historia, declarado por Bonifacio VIII en el 1300.

3) Santa María la Mayor – La Puerta Santa de Santa María la Mayor no tiene ninguna decoración (un helecho, quizás), aunque sí tiene un gran letrero que dice “Porta Santa”, así que no tiene pérdida. Se encuentra en el lado izquierdo en vez del derecho —a diferencia de otras basílicas— y la puerta cerrada inmediatamente delante dificulta la preparación de cualquier tipo de procesión solemne a través de la puerta. Una vez más, la información escasea, aunque los voluntarios siempre están contentos de servir de ayuda. Las puertas en sí son un triunfo de “poder femenino” mariano pasado y presente: un lado muestra la declaración de María como “Madre de Dios” en el siglo V y el otro recoge el pronunciamiento de María como “Madre de la Iglesia” en el Concilio Vaticano II en el siglo XX. Nada más adentrarnos en la iglesia nos disponemos directamente a los pies de Nuestra Señora Reina de la Paz. No faltan confesores en María la Mayor y cuesta imaginar un lugar mejor para rezar por las intenciones del Santo Padre que bajo la Madonna Salus Populi Romani, donde el mismísimo Papa va a rezar antes de cada viaje.



2)  San Pablo Extramuros – San Pablo recibe al agotado peregrino con un oasis de paz. La hierba verde, las palmeras altas y la silenciosa estatua del Apóstol de los Gentiles favorecen un cambio de actitud hacia la contemplación. Incluso hay una forma de agilizar el tránsito de las líneas de seguridad: emula a los apóstoles y “no lleves nada (…) ni bastón, ni bolsa” (Lc 9:3) y podrás acceder por la entrada lateral. La Puerta Santa de San Pablo tiene una ventaja injusta: lleva más tiempo funcionando que el Año Santo, así que después de pasar la primera serie de puertas modernas, mira de nuevo y verás las increíbles puertas de bronce de 1070. Hay instrucciones claras en varios idiomas antes de las puertas que permiten al peregrino prepararse adecuadamente. El umbral está cubierto con una alfombra roja (¿quién dijo que uno no puede arrepentirse con estilo?) y el peregrino se aproxima al altar de malaquita presidido por una cruz mayor y un cuenco de agua bendita. Ya has llegado. Luego, a unos 100 metros con confesores marcando el camino, se encuentra la tumba de San Pablo, donde encontrarás más instrucciones para la indulgencia. Si sumamos los generosos e impecables lavabos, esta es la basílica más misericordiosa.

1) Basílica de San Pedro– A pesar de la multitud y la seguridad y la “inscripción de peregrinos”, es imposible mejorar la experiencia de la Puerta Santa de San Pedro. Los peregrinos inscritos comienzan en el Castel Sant’Angelo y reciben una cruz jubilar que habrán de portar a lo largo de la Via della Conciliazione (que precisamente significa Camino de la Reconciliación). También reciben oraciones para recitar y una lista con las condiciones de la indulgencia. Cuando se ve a los rezagados recuperar su sitio dentro de los grupos organizados, entendemos el significado de ecclesia, una convocatoria, una ceremonia, una asamblea de personas. Una diligente línea de seguridad permite una entrada relativamente ágil; sin embargo, el tráfico en la Puerta Santa es un problema (se cruza con el flujo de turistas de los Museos), pero los voluntarios despejan el camino para los peregrinos. No se permiten fotos en esta puerta (no es una ocasión para presumir con selfies) y tampoco hay decoración, pero es imposible no identificar el lugar. Para sorpresa, son las puertas más pequeñas de la fachada, pero son una obra espléndida en bronce de la mano de Vico Consorti en 1949. Mientras entras, te reciben a la altura de los ojos imágenes de perdón: la mujer que limpió los pies de Jesús con sus lágrimas, Jesús diciendo a Pedro que debe perdonar “no hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete”, Pedro pidiendo perdón por su traición, y la Crucifixión de Cristo. Tras caminar a través de estas ilustraciones de redención, de inmediato nos asalta el alto precio de nuestra salvación con la Pietà de Miguel Ángel, estratégicamente situada junto a la Puerta Santa. Al mirar el cuerpo sin vida de Cristo, Miguel Ángel dirige nuestra atención hacia María, nuestra guía. El escultor florentino nos muestra la firme confianza de María en Dios, solemne pero calmada, abrazando la divina voluntad incluso en la hora más oscura. Ella es el ejemplo a seguir para confrontar los desafíos que se nos presenten en nuestro estado renovado.

En San Pedro hay tantísimos confesores que algunos se han instalado en las zonas más transitadas por los turistas, atrayendo a nuevos penitentes con su simple disponibilidad. Puedes rezar incluso en la tumba de san Juan Pablo II, que condujo al mundo hacia el último gran Jubileo. ¡No te lo pierdas!

Si decidieras iniciar tu propio estudio de las Puertas Santas, recuerda que puedes recibir una indulgencia no sólo para ti mismo, sino también para los difuntos, así que no olvides a familia y amigos, o tal vez puedas ofrecer una o dos indulgencias para las víctimas de la violencia sin sentido que nunca tendrán una oportunidad de ver una Puerta Santa.

Nace una nueva devoción: el Camino de la Misericordia

21 estaciones en las que se meditan pasajes bíblicos



Animando a contemplar el misterio de la misericordia, al que ha llamado el papa Francisco al convocar el Año Santo cuando dice que ella “es fuente de alegría, de serenidad y de paz”, y “es condición para nuestra salvación”, en Polonia ha nacido una nueva devoción en torno a este gran misterio de Dios.

Se trata del “Camino de la Misericordia”, una hermosa práctica de piedad en torno a la Misericordia que se celebró por primera vez el pasado sábado 2 de abril en el Santuario de la Divina Misericordia de Lagiewniki, Cracovia, por iniciativa del Padre Franciszek Slusarczyk, rector del santuario.

“Esto fue una sorpresa. Por primera vez, desde Cracovia, Polonia, el mundo se enteró de que en este lugar, en el Año de la Misericordia, ha nacido una nueva chispa de la misericordia para convertirse en una nueva forma de profunda oración”, dijo el sacerdote, quien fue citado en nota de prensa difundida por la organización de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Cracovia 2016.

El sacerdote también manifestó su anhelo de que la devoción se difunda por todo el mundo: “Tengo la esperanza de que el Camino de la Misericordia pueda ser vivido no sólo en el Santuario de la Divina Misericordia, en Lagiewniki, sino también en todos los lugares de culto a la Divina Misericordia”

La devoción consiste en 21 estaciones en las que se meditan pasajes bíblicos, así como apartes de la encíclica Dives in Misericordia del papa Juan Pablo II; y extractos del Diario de santa Faustina Kowalska, religiosa polaca conocida como “Apóstol de la Misericordia”.

El pasado sábado, en la víspera del Domingo de la Misericordia -festividad que precisamente fue instituida por san Juan Pablo II para que se celebre cada año en el Segundo Domingo de Pascua-, se oraron las primeras 7 estaciones que hacen referencia a la experiencia de la fe en Jesús.

Se trata, según explicó Malgorzata Pabis, vocera del santuario, de “encontrarse con el Señor Jesús a la luz de la fe, porque Jesús no sólo proclama el mensaje de la Misericordia, sino que también actúa en consecuencia: les da la vista a los ciegos, purifica a los leprosos, resucita a los muertos y derrama esperanza en los corazones de la gente”.

Ya desde la octava a la catorce se medita sobre el Camino de la Cruz, cuando el propio Jesucristo acudió a la Misericordia del Padre y recibió misericordia en su camino a la Crucifixión. Aquí se recuerdan a la Verónica, a Simón de Cirene y a la misma Madre de Dios.

Mientras tanto, en las estaciones restantes -de la 15 a la 21- se medita en los principales acontecimientos que tuvieron lugar tras la Resurrección de Jesús.

“Los otros encuentros con Jesús, durante el Camino de la Misericordia nos hablan de cómo el Señor Jesús no sólo recorre los caminos que llevan a las ciudades y a los pueblos de nuestro presente, del mundo de hoy, sino que además va al encuentro de las personas, lleno de misericordia y compasión”, expuso el padre Franciszek Slusarczyk.

El santuario polaco, que también se está preparando para recibir a millones de peregrinos el próximo julio con motivo de la JMJ, ya anunció la edición de un libro y un CD para el “Camino de la Misericordia”, una devoción a la que muy seguramente se le dará gran impulso con el encuentro mundial de jóvenes y el Año Santo de la Misericordia.

domingo, 17 de julio de 2016

Alpha: ¿No tienes fe? ¡Mejor!

Nicky Gumbel, desarrollador de Alpha, ofrece un espacio para explorar las grandes preguntas de la vida



Alpha tiene algo especial, es un método que usan diferentes iglesias para difundir la fe. En esta entrevista, en esta casa de Londres, Nicky Gumpel, el desarrollador de este curso que llega a 29 millones de personas, nos revela una sorprendente respuesta.

“Descubrimos que hay muchas personas que no van a la iglesia, que quizás no se llamarían cristianas a sí mismas, pero que están interesadas en las grandes preguntas de la vida, como por qué estoy aquí o qué sentido tiene mi vida”.

“Lo que la gente quiere es un espacio donde poder explorar eso: aislados, relajados, sin miedo, sin presión, con respeto. La gente viene, comen juntos, charlan y luego toman un café y así hablamos todos”.

“La primera vez que la Iglesia católica se interesó en poner en marcha Alpha fue en 1996. El cardenal Hume nos invitó a que diéramos una conferencia para sacerdotes católicos en la catedral de Westminster, luego se suscribió una iglesia y luego otra y así se difundió por todo el mundo, empezando por Francia y Europa, y ahora hay 70 u 80 países en los que Alpha está en funcionamiento en la Iglesia católica”.

“Alpha es un proceso natural basado en el respeto a las personas, en ofrecerles una oportunidad de encontrar a Jesús de una manera muy similar a la que plantea el papa Francisco”.

publicado originalmente por aleteia

¿Tienes alguna pregunta sobre la JMJ? ¡Llámanos!

Llamando al Call Center de la JMJ no nos atiende una voz automatizada, como en una típica línea telefónica, en la mayor parte del tiempo


Esta sólo está presente al comienzo de la llamada, cuando elegimos el idioma en el que queremos tener una conversación. A continuación, en seguida seremos atendidos por un voluntario amable y servicial.

Podemos dirigirnos al Call Center JMJ prácticamente con cualquier pregunta relativa al próximo evento. ¿Cuáles son las consultas más frecuentes? Como señala Lucas Schibowski, el coordinador del Centro de Llamadas, las consultas más comunes se refieren a cuestiones de transporte y alojamiento.

En los últimos días, también hay preguntas sobre las entradas gratuitas para las personas que vienen a la JMJ sin haberse registrado antes.

¿Quién está al otro lado de la línea? Todos los días hay once voluntarios a la espera de las llamadas de los peregrinos. Tres de ellos se dedican a atender a los polacos y hay dos voluntarios para atener en cada uno de los siguientes idiomas: inglés, italiano, español y francés (son los llamados hablantes nativos (native speaker), voluntarios del extranjero para los que cada una de estas lenguas es su lengua materna).

En estos días podemos ser atendidos por los consultores del Call Center de lunes a viernes desde las 9 h. hasta las 13 h. y desde las 14 h. hasta las 17 h. Para ello, hay que llamar al siguiente número: +48 12 446 73 33.

Debido al creciente interés por la línea, desde el 25 de julio y hasta el 1 de agosto, esta funcionará las 24 horas del día. Dado que cada día aumenta la intensidad del trabajo, tenemos que saber que llamando al teléfono del Call Center, quizás tendremos que esperar un rato hasta que nos puedan atener los consultores.

Los voluntarios también responden a las preguntas enviadas por correo electrónico. La dirección electrónica para los peregrinos españoles es la siguiente: info.es@krakow2016.com.

Esta forma de comunicación también fue testada por nosotros. Funciona igual de bien.

sábado, 16 de julio de 2016

¿Quieres hablar con Dios?

Cada día resulta más fácil comunicarse con las personas; pero, ¿y con Dios?.


Aquí tienes ocho reglas para llamarle y contar con Él, cuando desees:

1.    Marca el prefijo correcto. No a lo loco.
2.    Una conversación telefónica con Dios no es un monólogo. No hables sin parar, escucha al que habla al otro lado.
3.    Si la conversación se interrumpe, comprueba si has sido tú el causante del corte.
4.    No adoptes la costumbre de llamar sólo en casos de urgencia. Eso no es trato de amigos.
5.    No seas tacaño. No llames sólo a las horas de "tarifa reducida", es decir, cuando toca o en fines de semana. Una llamada breve en cualquier momento del día sería ideal.
6.    Las llamadas son gratuitas y no pagan impuestos.
7.    No olvides decirle a Dios que te deje en el contestador todos los mensajes que quiera y cuando quiera.
8. Toma nota de las indicaciones que Él te diga para que no las eches en olvido.
Si a pesar del cumplimiento de estas reglas la comunicación se torna difícil, dirígete con toda confianza a las oficinas del Espíritu Santo. Él restablecerá la comunicación.

Si tu teléfono no funciona, llévalo al taller de reparación que lleva por nombre "Sacramento del Perdón". Allí todas las reparaciones son gratuitas y tienen una garantía de por vida.

Texto de un empleado de TELECOM en Francia