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martes, 19 de julio de 2016

Asombroso: Profecías del Antiguo Testamento cumplidas en Jesús

Una impactante comparación de textos bíblicos de antes de nacer Cristo y de después


Sabemos que en Jesucristo se cumplen todas las profecías que hablan de Él en el Antiguo Testamento; y sabemos que son muchas profecías, algunos cuentan más de 300.

Esas profecías anuncian sobre su persona, sus acciones, su doctrina, de forma más o menos directa, más o menos velada. El cumplimiento de todas esas profecías es uno de los motivos que nos llevan a saber que la Biblia está inspirada por el Espíritu Santo.

Jesús sabe que las profecías mesiánicas se refieren a Él. 

Al leer Isaías en la sinagoga de Nazaret, afirma: “Hoy se está cumpliendo ante vosotros esta escritura” (Lc. 4, 21). A los fariseos que rehúsan creer en El, les dice: “Escudriñad las Escrituras ya que en ellas esperáis tener la vida eterna; ellas testifican de mí” (Jn. 5, 39).

El evangelista Mateo se propone en su evangelio demostrar que Jesús es el Mesías, basándose en las profecías del Antiguo Testamento.

Profecías que anuncian a Jesucristo, cientos y miles de años antes, incluso desde el punto de vista estadístico, de probabilidades de cumplimiento, exigen realmente una clara intervención divina.

Vamos a tomar una pequeña muestra de esas profecías en aspectos que nos resultan más familiares, en los que se refieren a los grandes momentos de su vida.

Descendiente de la tribu de Judá

Génesis 49:10 “El cetro no se apartará de Judá ni el bastón de mando de entre sus piernas, hasta que llegue aquel a quien le pertenece y a quien los pueblos deben obediencia”.

Lucas 3:33 “Naasón, hijo de Aminadab; Aminadab, hijo de Admín; Admín, hijo de Arní; Arní, hijo de Esrom; Esrom, hijo de Fares; Fares, hijo de Judá”.



Nacimiento en Belén

Miqueas 5:1 “Y tú, Belén Efratá, tan pequeña entre los clanes de Judá, de ti me nacerá el que debe gobernar a Israel: sus orígenes se remontan al pasado, a un tiempo inmemorial”.

Mateo 2:1 “Cuando nació Jesús, en Belén de Judea, bajo el reinado de Herodes, unos magos de Oriente se presentaron en Jerusalén”.



Nacimiento de una virgen

Isaías 7:14 “Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llevará por nombre Emanuel.”

Mateo 1:18 “El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo.”



Matanza de los niños de Belén

Jeremías 31:15 “Así habla el Señor: ¡Escuchen! En Ramá se oyen lamentos, llantos de amargura: es Raquel que llora a sus hijos; ella no quiere ser consolada, porque ya no existen..”

Mateo 2:16 “Herodes entonces, cuando se vio burlado por los magos, se enojó mucho, y mandó matar a todos los niños menores de dos años que había en Belén y en todos sus alrededores, conforme al tiempo que había inquirido de los magos”.



Huida a Egipto

Oseas 11:1 “Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.”

Mateo 2:14 “José se levantó, tomó de noche al niño y a su madre, y se fue a Egipto.”



Predicación en Galilea y en las cercanías del río Jordán

Isaías 8:23 “En un primer tiempo, el Señor humilló al país de Zabulón y al país de Neftalí, pero en el futuro llenará de gloria la ruta del mar, el otro lado del Jordán, el distrito de los paganos

Isaías 9:1 “El pueblo que caminaba en las tinieblas ha visto una gran luz: sobre los que habitaban en el país de la oscuridad ha brillado una luz.”

Mateo 4:12-16 “12. Cuando Jesús se enteró de que Juan había sido arrestado, se retiró a Galilea. 13. Y, dejando Nazaret, se estableció en Cafarnaúm, a orillas del lago, en los confines de Zabulón y Neftalí, 14. para que se cumpliera lo que había sido anunciado por el profeta Isaías: 15. “¡Tierra de Zabulón, tierra de Neftalí, camino del mar, país de la Transjordania, Galilea de las naciones! 16. El pueblo que se hallaba en tinieblas vio una gran luz; sobre los que vivían en las oscuras regiones de la muerte, se levantó una luz”.


Desprecio del pueblo judío

Isaías 53:3 “Despreciado, desechado por los hombres, abrumado de dolores y habituado al sufrimiento, como alguien ante quien se aparta el rostro, tan despreciado, que lo tuvimos por nada”.

Juan 1:11 “A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron”.



Entrada triunfal en Jerusalén sobre un pollino

Zacarías 9:9 “¡Alégrate mucho, hija de Sión! ¡Grita de júbilo, hija de Jerusalén! Mira que tu Rey viene hacia ti; él es justo y victorioso, es humilde y está montado sobre un asno, sobre la cría de un asna”.

Juan 12:13-14 “Tomaron ramas de palmera y salieron a recibirle, y clamaban: ¡Hosanna! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor, el Rey de Israel! Y halló Jesús un asnillo, y montó sobre él, como está escrito”.



Traicionado por uno de los suyos

Salmo 41:10“Hasta mi amigo más íntimo, en quien yo confiaba, el que comió mi pan, se puso contra mí”.

Marcos 14:10 “Entonces Judas Iscariote, uno de los doce, fue a los principales sacerdotes para entregárselo.”



Sería vendido por 30 piezas de plata

Zacarías 11:12 “Yo les dije: «Si les parece bien, páguenme mi salario; y si no, déjenlo». Ellos pesaron mi salario: treinta siclos de plata.”

Mateo 26:15 “Y les dijo: ¿Qué me queréis dar, y yo os lo entregaré? Y ellos le asignaron treinta piezas de plata.”



El precio sería devuelto

Zacarías 11:13 “Pero el Señor me dijo: « ¡Echa al Tesoro ese lindo precio en que he sido valuado por ellos!». Yo tomé los treinta siclos de plata y los eché en el Tesoro de la Casa del Señor.”

Mateo 27:6-7 “Los principales sacerdotes, tomando las piezas de plata, dijeron: No es lícito echarlas en el tesoro de las ofrendas, porque es precio de sangre. Y después de consultar, compraron con ellas el campo del alfarero, para sepultura de los extranjeros”.



Durante su juicio se mantendría en silencio

Isaías 53:7 “Al ser maltratado, se humillaba y ni siquiera abría su boca: como un cordero llevado al matadero, como una oveja muda ante el que la esquila, él no abría su boca”.

Mateo 26:62-63 “Y levantándose el sumo sacerdote, le dijo: ¿No respondes nada? ¿Qué testifican éstos contra ti? Más Jesús callaba. Entonces el sumo sacerdote le dijo: Te conjuro por el Dios viviente, que nos digas si eres tú el Cristo, el Hijo de Dios”.



Sufriría por los demás

Isaías 53:4-5 “Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados”.

Mateo 8:16-17 “Y como fue ya tarde, trajeron a él muchos endemoniados: y echó los demonios con la palabra, y sanó a todos los enfermos; Para que se cumpliese lo que fue dicho por el profeta Isaías, que dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias”.



Crucificado con malhechores

Isaías 53:12 “Por tanto, yo le daré parte con los grandes, y con los fuertes repartirá despojos; por cuanto derramó su vida hasta la muerte, y fue contado con los pecadores, habiendo él llevado el pecado de muchos, y orado por los transgresores”.

Mateo 27:38 “Entonces crucificaron con él a dos ladrones, uno a la derecha, y otro a la izquierda.”



Sus manos y pies serían perforados

Salmo 22:16 “Porque perros me han rodeado; Me ha cercado cuadrilla de malignos; Horadaron mis manos y mis pies”.

Juan 20:27 “Luego dijo a Tomás: Pon aquí tu dedo, y mira mis manos; y acerca tu mano, y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente.”



Sería escarnecido y despreciado

Salmo 22:6-8 “Mas yo soy gusano, y no hombre; Oprobio de los hombres, y despreciado del pueblo. 7. Todos los que me ven me escarnecen; Estiran la boca, menean la cabeza, diciendo: 8. Se encomendó al Señor; líbrele él; Sálvele, puesto que en él se complacía.”

Mateo 27:39-40 “Y los que pasaban le injuriaban, meneando la cabeza, 40. y diciendo: Tú que derribas el templo, y en tres días lo reedificas, sálvate a ti mismo; si eres Hijo de Dios, desciende de la cruz.”



Le darían a beber vinagre

Salmo 69:21 “Me pusieron además hiel por comida, Y en mi sed me dieron a beber vinagre”.

Juan 19:29 “Y estaba allí una vasija llena de vinagre; entonces ellos empaparon en vinagre una esponja, y poniéndola en un hisopo, se la acercaron a la boca”.



Su costado sería traspasado

Zacarías 12:10 “Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito.”

Juan 19:34 “Pero uno de los soldados le abrió el costado con una lanza, y al instante salió sangre y agua”.



Sobre sus ropas echarían suertes

Salmo 22:18 “Repartieron entre sí mis vestidos, Y sobre mi ropa echaron suertes”.

Marcos 15:24 “Cuando le hubieron crucificado, repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes sobre ellos para ver qué se llevaría cada uno”.



Ninguno de sus huesos serían quebrados

Salmo 34:20 “El guarda todos sus huesos; Ni uno de ellos será quebrantado”.

Juan 19:33 “Mas cuando llegaron a Jesús, como le vieron ya muerto, no le quebraron las piernas”.



Sepultado en una tumba de ricos

Isaías 53:9 “Y se dispuso con los impíos su sepultura, mas con los ricos fue en su muerte; aunque nunca hizo maldad, ni hubo engaño en su boca.”

Mateo 27:57-60 “Cuando llegó la noche, vino un hombre rico de Arimatea, llamado José, que también había sido discípulo de Jesús. Este fue a Pilato y pidió el cuerpo de Jesús. Entonces Pilato mandó que se le diese el cuerpo. Y tomando José el cuerpo, lo envolvió en una sábana limpia, 60. y lo puso en su sepulcro nuevo, que había labrado en la peña; y después de hacer rodar una gran piedra a la entrada del sepulcro, se fue”.


Resucitaría después de su muerte

Salmo 16:10 “Porque no dejarás mi alma en el Seol, Ni permitirás que tu santo vea corrupción”.

Mateo 28:9 “He aquí, Jesús les salió al encuentro, diciendo: ¡Salve! Y ellas, acercándose, abrazaron sus pies, y le adoraron”.


Ascendería al cielo

Salmo 68:18 “Subiste a lo alto, cautivaste la cautividad, Tomaste dones para los hombres, Y también para los rebeldes, para que habite entre ellos Dios”.

Lucas 24:50-51 “Y los sacó fuera hasta Betania, y alzando sus manos, los bendijo. Y aconteció que bendiciéndolos, se separó de ellos, y fue llevado arriba al cielo”.

Reliquias: ¿Qué poder tienen?

Contemplando los huesos, o a veces todo el cuerpo, de alguien que dedicó su vida a Dios de modo tan especial que se convirtió en santo, nace el deseo de una vida similar.


El encuentro con las reliquias tiene que cambiar algo en mí. No se trata de un poder mágico, no es el culto por el culto. No adoramos los huesos, sino reconocemos la santidad de la persona, explica en la siguiente entrevista el dominico Jacek Szymczak.

¿De dónde viene lo del culto de las reliquias?

Es una forma de devoción que nació entre los fieles y se formó desde abajo. Está presente en la Iglesia desde el principio, desde los primeros siglos, incluso décadas, de la existencia del cristianismo.

Tuvimos entonces muchos mártires. La gente empezó a acudir espontáneamente a sus tumbas para honrar los restos enterrados.

Pero no todo el mundo tenía esa oportunidad. De ahí la idea de que los mismos trozos, partes del cuerpo, viajaran por el mundo y en cierto sentido peregrinaran a nosotros.

¿Todos los católicos deberían venerar las reliquias?

No hay ninguna orden por parte de la Iglesia. Esta forma de culto no es obligatoria.

Cuando alguna reliquia llega a tu parroquia y, por ejemplo, hay una procesión o adoración, y te sientes distante, sientes en ti mismo que esto no te atrae, no pasa nada si te quedas sentado.

Sentirse distante es decir poco. Muchos católicos simplemente no lo entienden, y algunos incluso lo consideran un tipo de chamanismo.

El culto a las reliquias, contrariamente a lo que muchos creen, es profundamente cristiano. Y esto debido a que, paradójicamente, muestra que el cuerpo humano no es un saco ni una jaula para el alma de la que sólo la muerte nos libera.

No, el cristianismo aporta un enorme valor al cuerpo. Recordamos a san Pablo, quien en la primera carta a los Corintios escribe: “¿No sabéis que vuestro cuerpo es el templo del Espíritu Santo? (…) Por lo tanto, alabad a Dios en vuestro cuerpo”.

Esta es la primera perspectiva del culto: del cuerpo vivo. Sin embargo, aún hay otra que es la de la resurrección.

No se puede contemplar de una manera madura la adoración de las reliquias sin la resurrección. Sin ella, todo se rompe. Se convierte en teatro o en una compañía de circo ambulante.

La cuestión de la resurrección, según muestran algunos estudios, es bastante ajena a nosotros…

Tengo la impresión de que la doctrina de la resurrección, que después de todo es el fundamento de nuestra fe, es apenas enseñada por la Iglesia.

Aún podemos hablar de ella desde el púlpito de una manera inteligente e interesante, pero los fieles no tratan la verdad de la resurrección como fundamental para su fe.

Pero ¿por qué la cuestión de la resurrección es importante para una buena comprensión del culto de las reliquias?

Recordemos que después de la muerte de cada cuerpo, el santo, menos santo o incluso de un gran pecador, tendrá su resurrección. Se trata de la perspectiva tanto del que irá al cielo, como del que puede ir al infierno.

Si Dios ha querido que nuestros cuerpos después de la muerte de algún modo resurgieran, significa que se merecen la debida atención.

Así pues, la doctrina de la resurrección nos lleva por el camino del respeto por los restos de nuestros seres queridos depositados en las tumbas.

Si veneramos las cenizas de los miembros de nuestras familias, también podemos venerar las reliquias o los restos de los santos.

Bueno, pero a veces ocurre que tratamos con objetos pertenecientes a los santos, no sólo sus propios cuerpos.

Soy escéptico con este tipo de historias, tales como la presentación de la canoa en la que navegaba san Juan Pablo II, como una reliquia.

Me dan pequeños escalofríos cuando veo este tipo de personas que están intentando celebrar de alguna manera tal objeto como algo mágico.

Si detrás del culto de las reliquias no va la enseñanza de la Iglesia que lo explica de forma pastoral y desde la perspectiva adecuada, la gente empieza a entrar en terrenos que no tienen nada que ver con la fe.

Y para las personas que miran desde el exterior, efectivamente, este hecho puede verse como un acto del chamanismo.

Me he dado cuenta de que las reliquias disfrutan en nuestras iglesias de mucha popularidad. Cada vez más se las colocan de forma permanente en las capillas laterales y la gente se arrodilla delante de ellas para rezar como ante el tabernáculo.

En el culto a las reliquias es muy importante que no eclipse el culto eucarístico. No culpo aquí a los fieles, sino a nosotros, el clero.

Si se insiste tanto en, por ejemplo, que una Eucaristía se celebre con un cáliz de san Juan Pablo II, y al mismo tiempo la conciencia de la Eucaristía entre los fieles no es muy elevada, no nos debemos sorprender de que para algunos esta copa será más importante que los contenidos de la misa.

¿Después de todo, sería posible mostrarle positivamente las reliquias al hombre moderno y darle una idea novedosa para utilizarlas?

Veamos. Nosotros mismos guardamos diversos artículos que pertenecieron a nuestros muertos. Todos aquellos que vivieron la muerte de un ser querido, saben lo difícil que es deshacerse de sus cosas.

Hace poco alguien me mostró un hermoso abanico de su bisabuela. Sabemos que la historia de este objeto no es la historia del abanico, sino de la bisabuela.

Si un objeto así nos ayuda a recordar a la persona, lo harán aún más unos huesos humanos.

Contemplando los huesos o veces todo el cuerpo de alguien que ha vivido consagrado a Dios de manera tan estricta que se convirtió en santo, deberíamos proyectar en nosotros el deseo de una vida similar.

El encuentro con las reliquias tiene que cambiar algo en mí. Esto no es la toma mágica del poder, no es un culto por el culto. No les rendimos culto a los huesos, sino a la santidad de la persona.

Y cómo tratar tales ocasiones, como la peregrinación de las reliquias del beato Peter George Frassati en Polonia?

Se podría decir que es como si nos regalaran unas gafas. Asumo que estas gafas de la marca Frassati tienen el poder de ayudarme a enfocar correctamente la perspectiva adecuada para mirar en dos dimensiones: en la de Dios presente en la vida de la persona cuyas reliquias adoro y en la de mi propia vida.

Y aún más, se refiere a un vistazo de ti mismo en su totalidad. Si en el marco del culto a los santos, junto con la oración, imitación de sus vidas, aprendizaje de sus biografías y sus preciosos escritos y pensamientos, veneramos además sus reliquias, o sus cuerpos, esto significa algo.

Es una llamada al sabio cuidado de nuestros propios cuerpos.

Este tipo de eventos, como el relacionado con la peregrinación de las reliquias del beato Frassati, vale la pena tratar como el encuentro con alguien quien vivió plenamente en Dios.

De esta manera, se convierte en una guía para mí, en una brújula que me puede mostrar cómo vivir para caminar en santidad. Porque esta persona ya se encuentra en el lugar, que también es mi objetivo.

[Venerar las reliquias] no consiste en mirar un hueso a través de un cristal, ni en adorar un ataúd. Se debería hacer diciendo: Quiero llegar al mismo lugar donde tú te encuentras.

Artista se dirige a la Jornada Mundial de la Juventud con una misión

No será la primera vez que él y el papa Francisco se encuentren

Ryan Tremblay


“Se supone que soy un soñador. Aspiro a lo grande, y a veces las cosas no necesariamente salen de la manera que esperas o sueñas. Sin embargo, me he dado cuenta de que muchas bendiciones se presentan siguiendo adelante y aspirando a lo grande”, dijo el artista cristiano Ryan Tremblay en una entrevista con Rhode Island Catholic.

Tremblay se encuentra entre los seleccionados oficiales por el comité organizador de la Jornada Mundial de la Juventud para actuar durante las festividades.

Ryan conoció al Papa anteriormente, cuando él y su esposa Elizabeth fueron a que Francisco bendijera su matrimonio en una audiencia en 2014. El encuentro fue milagroso para la pareja: se les había dicho que tenían 1% de probabilidades de tener hijos. Unas semanas después de la bendición, los Tremblays esperaban no un hijo sino tres.

Es comprensible que Tremblay quisiera ver al Papa una segunda vez, para mostrar su gratitud y compartir su ministerio musical. Pero ¿de dónde viene su casi sobrenatural optimismo?

Quizá tenga algo que ver con su hermana Erica.

Erica fue diagnosticada con cáncer de mama a las 14 semanas de su segundo embarazo. Decidió seguir adelante con el embarazo a pesar de los riesgos para su salud. Tras dar a luz a una niña sana, falleció algunas semanas después.

“Antes de morir, me dijo, ‘Ryan, tengo una sensación. Sé que has querido ver tu ministerio musical crecer. Este será tu año'”. Tremblay lo explicó en la entrevista con Rhode Island Catholic.

Compartir su música con el Papa ciertamente será una buen forma de empezar. Cecilia estará presente en la Jornada Mundial de la Juventud siguiendo a Tremblay y a todos tus artistas católicos favoritos. 

Para más información sobre Ryan Tremblay, y para apoyar su último proyecto, Trust: An EP for Erica, visita su página web.

A pocos días de JMJ 2016 el Papa pide a jóvenes buscar cuál es su “inquietud”


El Papa Francisco envió un videomensaje a las decenas de miles de jóvenes que participaron el sábado 16 de julio en el encuentro ecuménico Together 2016 en el Mall de Washington DC (Estados Unidos), para alentarlos a buscar a Cristo y así hallar la respuesta a la inquietud propia de la juventud, porque “un joven que no está inquieto, es un viejo”.
“Chicos y chicas –expresó Francisco a los jóvenes reunidos en Estados Unidos–, yo sé que ustedes en el corazón tienen algo que los mueve, que están inquietos, porque un joven que no está inquieto, es un viejo y ustedes tienen juventud y la juventud crea inquietud. Te pregunto: ¿cuál es tu inquietud? ¿Sabes bien cuál es tu inquietud? ¿O no sabes? ¿Querés saber cuál es tu inquietud?”.
“Yo te invito –añadió Francisco– al gran encuentro de todos los jóvenes en Washington para encontrar a Quien puede darte una respuesta a esta inquietud. Yo te invito a que te pongas esta camiseta para que te revistas un día y puedas responder a esa gran inquietud. Y está seguro, te lo aseguro, no vas a estar frustrado, no vas a estar frustrada”.
El Papa aseguró a los jóvenes que “Él no desilusiona a nadie, Jesús te espera, Él es quien sembró en tu corazón la semilla de la inquietud. Animate, no tenés nada que perder, probá después me contás. Gracias”.
Este video mensaje ha sido difundido a pocos días de que se inicie la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Cracovia 2016, el cual reunirá en Polonia a cientos de miles de jóvenes de todas partes del mundo.

lunes, 18 de julio de 2016

¿Cuándo una puerta es más que una puerta? Descubre la “Puerta Santa”

Todo lo que siempre habías querido saber sobre las Puertas Santas – lo que son, y por qué habría que cruzar una



[Cuando se difundieron las imágenes del Papa Francisco abriendo la Puerta Santa en Bangui durante su visita a África muchos se plantearon: ¿Qué es una Puerta Santa? ¿Para qué sirve?”  Os ofrecemos una respuesta]

¿Qué es una Puerta Santa?

Una Puerta Santa es una puerta especial en una catedral o en una basílica que se abre sólo durante los años jubilares. Por tradición, la Puerta Santa es la de la basílica de San Pedro. Después de un año jubilar, es sellada y no se vuelve a abrir hasta el siguiente año jubilar. Los obreros ya han empezado a quitar los ladrillos a la Puerta Santa de la basílica de San Pedro para la ceremonia de la próxima semana.

¿Cuándo se abre una Puerta Santa?

En general debería suceder cada 25 años. Pío XII abrió la Puerta en 1950 y Pablo VI en 1975, pero San Juan Pablo II la abrió antes, en 1983, y otra vez en el 2000. Puede abrirse también durante años “extraordinarios”, como en el caso de 1983 y de este año. El Papa Francisco inaugurará el Año Jubilar de la Misericordia 2016 abriendo la Puerta el 8 de diciembre de 2015. La Puerta quedará abierta todo el año, cerrándose el 20 de noviembre de 2016. La fecha del 8 de diciembre ha sido elegida porque es la solemnidad de la Inmaculada Concepción, y marca el 50° aniversario de la clausura del Concilio Vaticano II.

¿Dónde están esas puertas?

Cada una de las demás basílicas mayores romanas tiene una Puerta Santa, que será abierta en las próximas semanas. La de San Juan de Letrán se abrirá el 13 de diciembre, Tercer Domingo de Adviento, mientras las Puertas de Santa María Mayor y de San Pablo Extramuros se abrirán en los domingos siguientes.

En la Misericordiae Vultus, la bula que anunciaba el Año de la Misericordia, el papa Francisco ofrece algo nuevo: un obispo tiene el permiso de designar una puerta de su diócesis como Puerta Santa.

“Para el mismo domingo establezco que en cada Iglesia particular, en la Catedral que es la Iglesia Madre para todos los fieles, o en la Concatedral o en una iglesia de significado especial se abra por todo el Año Santo una idéntica Puerta de la Misericordia. A juicio del Ordinario, ella podrá ser abierta también en los Santuarios, meta de tantos peregrinos que en estos lugares santos con frecuencia son tocados en el corazón por la gracia y encuentran el camino de la conversión. Cada Iglesia particular, entonces, estará directamente comprometida a vivir este Año Santo como un momento extraordinario de gracia y de renovación espiritual. El Jubileo, por tanto, será celebrado en Roma así como en las Iglesias particulares como signo visible de la comunión de toda la Iglesia”.

El Papa Francisco ha establecido también Puertas Santas en el Santuario de Nuestra Señora del Divino Amor y en el albergue de Cáritas, ambos en Roma.

¿Cómo se cierra una Puerta Santa?

Toda la entrada es cubierta de ladrillos y desde arriba se infiltra una fina capa de mortero. Una gran cruz se inserta en el mortero. Una cajita metálica se cierra y se incrusta en el muro de ladrillos.

¿Qué hay en la cajita?

Dentro hay varios objetos asociados al Año santo, como la bula formal que proclama el Año Jubilar. En preparación de la apertura de la puerta de la Basílica de San Pedro, se derriba el muro y se quita la cajita del año 2000. Entre otras cosas, contiene 41 medallas del pontificado de San Juan Pablo II: una de oro, por el Año Jubilar, 23 de plata, una por cada año de su pontificado, y 17 de bronce, por cada año desde el último Jubileo. Está también la llave para abrir la puerta, que se dará al Papa Francisco.

¿Cómo se abren las Puertas?

Hasta hace poco tiempo, el papa golpeaba el muro de ladrillos tres veces con un martillo, y después este era desmantelado y se abría la puerta. En los últimos años, el portero se quitaba y se “liberaban” los ladrillos, para que el muro pudiera derrumbarse cuando el papa lo golpeaba. Esto provocó problemas en 1975, cuando algunos restos golpearon al papa Pablo VI, por lo cual en la época de san Juan Pablo II el muro se quita antes y el papa se limita a abrir la Puerta de par en par.

¿Qué puerta es?

La Puerta es una obra de bronce macizo proyectada en 1949 por Ludovico Consorti y realizada por la fundición artística de Ferdinando Marinelli de Florencia. Se abrió por primera vez en el Jubileo de 1950. Sobre la puerta hay 16 paneles (cuatro por cuatro) que ilustran la historia de la salvación, desde la caída del hombre hasta la resurrección del cuerpo. La de San Pedro es una de las cinco puertas monumentales proyectadas por Consorti, que le hicieron ganar el sobrenombre de “Vico dell’uscio”.

Sobre la Puerta Santa de la basílica de San Pedro en el Vaticano, el maestro de las celebraciones litúrgicas de Pablo VI, el cardenal Virgilio Noè, comparaba los paneles a los versos de un himno, que cantan la infinita misericordia de Dios, subrayando que comienzan desde la realidad del pecado, que degrada al hombre, y van hasta la penitencia que lo rehabilita, e iluminan cada momento de cualquier situación con la certeza del perdón divino.

¿Qué sucede si voy en peregrinación a Roma y atravieso las Puertas?

¡Obtienes una indulgencia plenaria! ¡Toma esta, Martín Lutero! La remisión de la pena temporal por los pecados perdonados en confesión se ofrece a quien atraviesa las Puertas, recibe la Eucaristía y la reconciliación, reza por las intenciones del papa y realiza un acto de misericordia.

¿A qué se refiere todo esto?

El Papa Francisco ha dicho que “habrá en esta ocasión una Puerta de la Misericordia, por donde quien entre podrá experimentar el amor de Dios que consuela, que perdona y da esperanza”.

Las puertas son muy simbólicas. Representan un paso: del pecado a la redención, de la muerte a la vida, del no creer a la fe, etc. Jesús se describe a sí mismo como la puerta. La gente debe entrar a través de Cristo para llegar al Padre. La puerta es la vía de la salvación.

Hay también un simbolismo mariano, pues la Virgen María es la puerta a través de la cual la salvación entró en el mundo. Abrir las puertas en la solemnidad de la Inmaculada Concepción tiene por tanto un doble significado.

Las puertas de una Iglesia marcan el límite entre lo sacro y lo profano. Abriéndolas de par en par (y en el aniversario del Concilio), el papa Francisco está subrayando su deseo de abrir de par en par las puertas de la fe al mundo.

En el Apocalipsis (3, 20), Jesús dice: “He aquí que estoy a la puerta y llamo. Si alguno escucha mi voz y me abre la puerta, entraré y comeré con él y él conmigo”.

En Jerusalén, la Puerta de Oro es el ingreso oriental del Monte del Templo. En hebreo se llama Sha’ar HaRachamim, la Puerta de la Misericordia. En la antigua tradición judía, allí aparecería la Shekhinah y que volverá a aparecer cuando vuelva el Mesías. Jesús debió atravesarla el Domingo de Ramos. Los textos apócrifos dicen que es allí donde María encontró a José después de la Anunciación, y así representa la encarnación. Fue tapiada en la Edad Media. Algunos textos medievales sugieren un vínculo entre la Puerta de Oro y la Puerta Santa.

¿Quién comenzó esta tradición?

No Alejandro VI, aunque durante mucho tiempo se creyó así. Presumiblemente él inauguró la costumbre en 1500, pero según Herbert Thurston en The Holy Year of Jubilee “es cierto que la idea central de abrir de par en par las puertas como símbolo de la efusión de la misericordia de Dios no tuvo origen en un pontificado tan poco edificante como en el del Papa Borgia”. La referencia a Alejandro VI deriva probablemente del ampliamente difundido Diarium de Johann Burchard, que fue maestro de celebraciones de cinco papas, incluido Alejandro.

Thurston retrocede en el tiempo para encontrar referencias que preceden a Alejandro VI al menos 200 años, y nos sugiere raíces aún más antiguas.

Medallas de 25 años antes, fechadas en el pontificado de Sixto IV, muestran al papa en la puerta.

A mitad del siglo XV, el viajero William Wey, de vuelta de Tierra Santa, escribió: “En el vestíbulo de la iglesia de San Pedro hay seis puertas, una de las cuales está cerrada, y esta es la auténtica Puerta de Oro”.

Hay también una sugerencia sobre que Clemente VI ((1342-1352) soñó que se le ordenaba que abriera una puerta, pero es insuficiente y algunos de los documentos son poco claros.

En 1437 Pedro Tafur unía la indulgencia del Jubileo al derecho de asilo al atravesar la puerta de la basílica de Letrán.

Esto sugiere una raíz muy antigua de esta costumbre, que se remontaría a Constantino, el cual pidió que el papa Silvestre publicase un edicto proclamando el derecho de asilo a los cristianos que entraban en la basílica. Por lo que parece, se abusó del privilegio y la puerta fue sellada, para ser abierta solo en los años jubilares.